La liguilla de ascenso, el reto del Recre.

El Recre encabeza la tabla de abonados con respecto a sus rivales y de una manera contundente.

La afición del Recres es muy fiel a su equipo y un año más lo demuestra, haciendo que el Decano sea el equipo con la masa social más amplia de cuantos clubes están en su grupo.

La afición del Recre es fiel a sus colores, a su escudo, a sus sentimientos por el Recreativo de Huelva, esté quien esté gobernando el club y es por ello que esta batalla de abonados entre todos los clubes del grupo esté llena de responsabilidad para los que mandan en el club, propiedad y consejo de administración.

La masa  social del Decano es sagrada y desde ya, con su paso por caja, sumando una cantidad más que importante de abonados, a éste día el que más tiene, tiene sus exigencias.

La afición es de poco protestar pero esta temporada, desde ya, está exigiendo retos, objetivos de liguilla. Ya pasó el año pasado por tener que aguantar el no reforzar al equipo teniendo dos fichas libres y sobre todo la excusa de Pablo Comas para no “gastar”. Lo de Comas saltó a final de mes y si en el Recre hubiera hecho su tarea, el equipo hubiera estado reforzado desde primeros de enero. Las excusas se la tragaron muy poquitos.

Esta temporada no hay excusas, no puede ser otro fracaso de gestión. Esta temporada debe y tiene que tener la obligación de entrar en liguilla. No hay otra. Entrar en liguilla de ascenso tiene que ser y será el reto a conseguir. Entre todos se podrá lograr, seguro.

Esta temporada, con la masa social que tenemos, con la asistencia al campo que habrá, con un grupo debilitado, sin Castellón, Málaga y Córdoba, no hay excusas para ponernos ese reto, ese objetivo, el que está acorde a la masa social que ampara al Decano.

No hay excusas y la liguilla nos la tendremos que jugar con equipos que se refuerzan muy bien pero que en el torneo de la regularidad debe de pesar, pesa y mucho tener el amparo de una afición que con su paso por caja demuestra su fidelidad al club a pesar del chasco del año pasado.

Ya no hay excusas y solo queda afrontar el reto, la obligación por respeto a la afición de pelear por el único objetivo que es jugar liguilla de ascenso.

Desde ya, el entrenador deberá conseguir resultados, esto ya es una realidad y con un grupo con menos “cocos”, tendrá la obligación de estar en la zona noble.

El director deportivo, tendrá que demostrar que acertó y se le pondrá nota por esa cuestión.

El presidente tiene que dejar el papel de pobrecito, de “vender” al Recre como si estuviésemos en las últimas y afrontar el reto. El victimismo que demuestra públicamente y sobre todo en privado con su comportamiento, no está a la altura de la masa social a la que representa y de manera remunerada, detalle que le acarrea más responsabilidad.

No se usted, que lee esto, pero yo no creo en que vendan un proyecto a cuatro años. La temporada pasada se puso a tiro y este año, con tres “cocos” fuera de la competición por sus ascensos conseguidos, el Recre tiene la obligación de entrar en liguilla.

La cifra de abonados, un campo que intimida por dimensiones y por asistencia de aficionados, segundo año en la categoría, la dimensión de nuestro terreno de juego. Somos una de las cinco capitales de provincia que competimos en nuestro grupo y eso también pesa.

Yo lo tengo claro. Este año, plantilla, entrenador, dirección deportiva y consejo de administración, tienen la posibilidad de enmendar la poca ambición de la temporada pasada.

La afición ya encabeza “su” liguilla, ahora el reto lo tiene el club.

Los puntos y la tabla harán que esta afición se pronuncie. De momento, todos estamos con muy buenas expectativas, ilusionados y con ganas de crecer. Los “cocos” ya no están y se abre el abanico. Ahora, el Recre es uno de los “cocos”. No será fácil pero es evidente que el objetivo es jugar la liguilla de ascenso.

Decirlo abiertamente es tener abierto el examen, cada uno en su cargo, aunque no pasa nada si no lo dicen públicamente ya que esta afición no es tonta.

Vamos de la mano, vamos todos juntos, a pesar de los vetos. Vamos a sumar pero vamos a exigir, sí o sí. Desde la exigencia se crece y a buen seguro que Oscar Arias acertará con los fichajes y saldrán mejores que los de enero del año pasado, no tengo duda alguna.

Vamos todos a una, a pesar de los vetos, pero vamos a ser exigentes, muy exigentes, vamos a estar a la altura de un club que lidera la tabla de abonados en su grupo donde ya no estarán ni Castellón, ni Málaga, ni Córdoba. Repetimos curso y las penurias, las justificaciones, las penitas y la poca ambición ya no es creíble.

Toca confiar en la plantilla que hagan. Toca confiar en el cuerpo técnico y toca confiar en Oscar Arias, toca confiar y confiaremos, seguro.

Termino como empecé. El paso por caja de la afición del Recre, llena de responsabilidad a los que tienen que darle mimbres al entrenador, se llame como se llame.